Con cada latido de mi corazón reivindico la evidencia de mi vida, de mi lucha, y de mi intención en seguir siempre hacia adelante. A veces con peor cara, otras, con la mejor de mis sonrisas.... pero este es mi gran propósito: latir fuerte, pisar más, y seguir poniénolo a prueba con equivocaciones e ilusiones.
Y si tenía alguna duda, ahora, en absoluto.