La Caja de los Truenos

LEJANÍA, NO INDIFERENCIA

Me muerdo la lengua, aunque me cueste.

Saldría corriendo y te taparía los ojos con las manos, para que no darte tiempo de reacción, para no dejarte pensar si debes o no evitarme, para taparte la boca a besos, para sacar tu escondido corazón y eliminar los prejuicios, miedos, temores, recelos, racionalidades, de su latido, y dejarlo desnudo para amarlo.

Simplemente me abstengo.

Ese intento desesperado me costó quedar a la deriva de una falsa ilusión, cuando tú ya sabías tu decisión, sin pronunciar la sentencia, prolongando el juego en el tiempo, estéril y dañino para mí.

Una vez te dije que al mirarte a los ojos ya no te veía a ti, sino a mi… que eras casi yo misma, parte de mi. Ahora me dices que al mirarte al espejo no te reconoces… ¿eso quiere decir que ya no me reconozco en ti?.

Todo quedó revelado por teléfono, a pesar de mis intentos de acercamiento, y no ya como amante, sino como alma… alma que ha sufrido e intenta evitarte el dolor que te produce abandonarme… en este intento sólo yo pierdo.

No puedo asumir mi dolor y el tuyo por provocármelo.

No te tomes mi lejanía como indiferencia.

Déjame estar fuerte para oírte sin dolor.

Si pensaste que yo era una cadena que te oprimía, córtala, ya no existe, ya no existía… nunca existió…

<__trans phrase="Posted by"> grache <__trans phrase="at"> 27 de Agosto 2004 a las 12:41 PM